alimentacion infantil saludable

Una buena alimentación infantil saludable y equilibrada ayuda a los pequeños a crecer fuertes y sanos. Es fundamental para el estado de salud de los niños, así como determinante para un correcto funcionamiento del organismo, una óptima capacidad de aprendizaje y un correcto desarrollo psicomotor. En definitiva, para poder comunicarse, pensar, socializar y adaptarse al medio que les rodea.

Al fin y al cabo, los niños se encuentran en un periodo de crecimiento muy importante, para lo que su cuerpo, necesita elevadas cantidades de energía y nutrientes. Cada grupo de alimentos (frutas, verduras, lácteos, carnes, pescados, carbohidratos y azúcares) tienen una función específica y esencial. Lo que tenemos que encontrar es un balance saludable en el consumo de cada grupo. De ahí la importancia de que nuestros peques mantengan una alimentación variada y equilibrada.

La importación de una buena alimentación infantil

No importa si es un bebé o si ya está en la pubertad, en todas sus fases de crecimiento, la alimentación juega un papel crucial. Sin embargo, en los primeros años cobra una especial relevancia, ya que, es el momento de establecer rutinas, y si no se fijan correctamente, luego serán más difíciles de cambiar.

Unas rutinas alimentarias equilibradas, junto con un estilo de vida saludable, reducirán las posibilidades de sufrir determinadas patologías en su edad adulta. Además de evitar trastornos nutricionales como la anemia, el sobrepeso o la obesidad.

En general, una dieta infantil saludable debe ser rica en cereales, frutas y verduras. En menor cantidad, es aconsejable consumir lácteos, huevos y pescado, así como carnes rojas y derivados. Escaso debe ser la ingesta de grasas saturadas y sal, así como de alimentos vacíos con mucho azúcar como la bollería industrial.

Breve guía para padres

A continuación, vamos a ver algunos consejos para educar a los más peques a tener una alimentación equilibrada:

  1. Infórmate antes de establecer una dieta. Es muy importante para saber qué tipo de alimentos son más aconsejables. Eso sí, procura que sean sanos y sin excesos de azúcar. También, tener en cuenta si tu hijo es alérgico o intolerante a ciertos alimentos.
  2. Intenta dar ejemplo a tus hijos. Los peques lo imitan todo al principio, por lo que, si ven que comes verduras y frutas, luego será más fácil que incorporen estos alimentos en su día a día.
  3. No obligues a tu hijo a comer. Mejor, proponle alimentos que los pueda probar, y así, pueda elegir cuáles prefiere.
  4. Involucra a tu hijo. A la gran mayoría les gusta participar en la selección de los alimentos que se van a servir en la comida. Llévatelos al supermercado y anímalos a participar en algún proceso de su cocinado.
  5. No llenes demasiado los platos. Recuerda que las proporciones infantiles son diferentes a las adultas.
  6. No hables de alimentos malos. Intenta resaltar las bondades de cada alimento.
  7. Escoge el agua como bebida de preferencia. Intenta que se acostumbre a comer con agua y no con otro tipo de bebidas azucaradas o gaseosas.
  8. Planifica un menú semanal antes de hacer la compra. Esto te ayudará a comprar lo imprescindible.
  9. Establece un horario para las comidas y meriendas. De esta forma tienen más claro cuando comer y cuando no.
  10. Dales de vez en cuando algún capricho dulce. El negar un alimento puede provocar el efecto contrario y desearlo más. Eso sí, evita utilizar el postre como recompensa por haber terminado la comida.
  11. Fomenta comer en familia. Esto puede convertirse en una costumbre agradable donde ponerte al día con tus hijos y disfrutar de un rato en familia.

Seguir estos consejos, junto con una actividad variada y saludable, influirá positivamente en el desarrollo cognitivo, psicomotor y conductual de tu hijo. En CEI Manolo Álvaro conocemos la importancia de una alimentación infantil saludable y equilibrada, especialmente en los primeros años. ¡Para cualquier consulta no olvides preguntarnos!

 

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